Un tema interesante son las prisiones, en México las cárceles son administradas por el gobierno. En México el presupuesto del gobierno para las prisiones es sumamente limitado, lo que provoca que las prisiones en México estén sobrepobladas. Esto provoca que las condiciones sean deficientes, acomodando en ocasiones a más de 5 reos en una celda lo cual podría considerarse inhumano ya que muchos duermen en el piso. Este sistema de prisiones al ser administrados por funcionarios públicos provoca que la corrupción se apodere de las cárceles, donde el tráfico de droga dentro y el manejo de operaciones delictivas desde dentro de las prisiones es una situación muy común.
Así como la falta de personal en las mismas provoca la fuga de muchos internos al año, así como problemas grandes como motines en las grandes prisiones donde muchas veces la violencia dentro de ellas llega a ocasionar muertes y muchos heridos.
Otro gran problema es que no existe división entre procesados y sentenciados ambos son colocados en las mismas zonas de las prisiones provocando que muchos inocentes convivan con criminales sentenciados.
Quizá el manejo por un particular de una prisión sea una forma más eficiente de administrar dichos lugares, el tema principal realmente es si estos centros ayudan a readaptar a los internos a la sociedad para evitar que repitan sus conductas delictivas.
En mi opinión el sistema de cárceles en cualquier país pocas veces cumple con el cometido de reformar a los internos, muchos de estos salen a repetir los crímenes y en su caso a cometer peores delitos cada vez. La vida en la prisión deja muchas veces enojo a los prisioneros y quita esas ganas de cambiar. La vida dentro de una prisión es difícil esto pocas veces motiva a los prisioneros al cambio.
Realmente lo que se debe hacer es trabajar en la prevención del delito, a través de la educación, producir empleos, estas situaciones se reflejan en el número de crímenes que tiene un país. La educación es la mejor arma contra los delitos, mejorar la condición de vida de la sociedad reduce la cantidad de personas en las cárceles.